domingo, 4 de julio de 2010

Mes nuevo, cita nueva (Julio)

"Si quieres llorar, ríe; si quieres andar, corre; si quieres vivir... vive"

Para los que tengáis más buena memoria esta frase os sonará, porque fue el título de mi post caótico de hace unos días. Y como todo buen post caótico debe tener su título sin sentido pero con mucho sentido, pues aquí va la explicación de la cita de mes:

Esta frase es mía, de esas que se me ocurren en un momento de inspiración. Pero después de escribirla, tuve que parar a pensar qué significaba.
Es simple, siempre que quieras hacer algo, haz lo contrario. Por ejemplo, si piensas una cosa, intenta pensar lo contrario, así sabrás cómo piensan los demás, esto no tiene porqué cambiar lo que opinamos, al contrario, pensando como los demás podemos llegar a comprender mejor sus opiniones y así rebatirlas exponer unos argumentos más firmes para defender nuestra posición.

Pero, en el único caso que no debemos hacer lo contrario es en vivir, si queremos vivir, vivimos, sin más. Y si no queremos vivir, vivimos igual, porque la vida es muy corta y no podemos desperdiciarla pensando en morir. Los problemas nos acechan todos los días a todas horas, dan ganas de tirarlo todo por la borda, pero no debemos hacerlo, tenemos que seguir adelante como sea: arañando los obstáculos, destrozándolos hasta que no quede nada de ellos.

Aquí tenéis uno de mis momentos de inspiración que resume un poco:

Rodeada de tumbas, de muertos, de espíritus que me persiguen, que se cuelan en mis sueños, que no me dejan vivir, que quieren verme a su lado, en una de esas tumbas encerrada, sin poder salir, sin respirar, sin ver, sin sentir...
Pero no lo conseguirán, nunca, porque no quiero dejar de sentir nada, ni siquiera quiero dejar de sentir el dolor, porque el dolor es vida, y yo quiero vivir.
Porque el suicidio es un acto de cobardía, y yo no soy cobarde, puede que no sea la persona más valiente del mundo, pero no por eso quiero acabar con todo.
Dolor, amor, felicidad, tristeza... quiero seguir sintiéndolo todo. Incluso sus puñaladas por la espalda y sus besos de disculpa después. Todo.